Cómo limpiar los filtros de la campana

Muchas personas pueden pensarse que es en el cuarto de baño donde existe el mayor foco de bacterias y de otros elementos que mantener una higiene extrema y evidentemente que el cuarto de baño es uno de los lugares del hogar donde existe un mayor número de elementos que así lo requieren.

Pero según muchos estudios de demostrada solvencia, puede que el aseo no sea el lugar del hogar donde se acumula un mayor nivel de suciedad, sino que el lugar donde se acumula un mayor nivel de suciedad sea la cocina y, muy especialmente, en las campanas extractoras por ello resulta imprescindible saber limpiarlas adecuadamente y saber de forma concreta limpiar filtros de la campana extractora de una forma correcta y eficiente.

Limpiar la cocina tiene muchas fases y muchas capas, pero muchas de ellas son de carácter superficial y no logran eliminar por completo el conjunto de suciedad acumulada, en muchas ocasiones se olvida que es en los recovecos de las cosas y en el interior de una campana extractora donde se encuentra un mayor nivel de suciedad acumulada, de ese aspecto nace la importancia de limpiar filtros de la campana de una forma firme y concienzuda.

Limpieza de filtros de la campana en el conjunto de la limpieza de esta

Nunca debemos olvidar que la función principal de una campana extractora es el mitigar el humo que se produce al cocinar en la cocina, la campana extractora es la encargada de realizar la succión de todo aquel humo que se va generando mientras estamos cociendo algo, mientras hacemos algo a la plancha, mientras lo freímos, etc…

La función de la campana es esencialmente la mencionada en el párrafo anterior y es en el desempeño de su función principal que la misma va incorporando a su seno grasas que también se van condensando y acumulando dentro de la misma, otros restos de suciedad que se incrustan y todo ello conduce además a la aparición de malos olores, etc.

El nivel de tiempo que deberá pasar entre limpiar los filtros de la campana dependerá mucho del nivel de uso que se le esté dando a los mismos, no se debe marcar en ningún caso un tiempo fijo pues ello dependerá mucho de la frecuencia con la que se cocine, de aquello que se cocine, de cómo se cocine aquello que se esté cocinando y de otras variables que podrán tener que tenerse muy en cuenta.

Por todo lo anterior, no podrá marcarse un tiempo preestablecido de cando se deben limpiar filtros campana, pero lo que sí que resulta cierto es que deberá realizarse de una forma más que regular. Lo anterior no es tan sólo una cuestión de higiene, limpieza y seguridad alimentaría (que evidentemente también lo es), lo anterior supone también un aspecto relevante para la vida útil de la campana, así como el gasto energético y el impacto medioambiental.

Y es que, una campana extractora que acumula suciedad, es una campana que no puede trabajar de una forma óptima y, al no poder trabajar de una forma óptima, la misma se ve forzada a funcionar de un modo que la va desgastando más rápidamente y además, muy probablemente no trabajará tampoco bien en lo relacionado con el consumo energético, nos hará gastar más en la factura de la luz y no será tan respetuosa con el medio ambiente tal y como debería serlo.

De no ser poco lo mencionado ya en los párrafos anteriores, tan sólo falta mencionar la seguridad como otro de los grandes elementos que invitan a limpiar filtros de campana, la seguridad lo es todo y una campana mal mantenida es un foco principal e importante para que se produzca un accidente por culpa del alto nivel de combustión de la grasa, por ello, de existir grasa acumulada en la misma se corre un grave riesgo de que un día incluso se pueda llegar a prender fuego a toda la cocina.

limpieza de filtros en la campana

El modo de limpiar la campana extractora

Existen dos variantes que resultan interesantes de mencionar en lo relacionado con limpiar filtros campana en particular y en limpiar las campanas extractoras en su conjunto en general. Existen dos variantes que resultan interesantes de mencionar pues si bien el fondo del asunto es la misma (la necesidad de limpiar la campana y la realización de la limpieza de una forma efectiva) la forma y los procedimientos, así como los requisitos de llevarla a cabo, pueden diferir y difieren en algunos aspectos.

Cuando estamos hablando de dos modos de limpieza nos estamos refiriendo por un lado al modo de limpieza que está relacionado con las campanas extractoras en locales comerciales (por ejemplo, bares u otros locales relacionados con la hostelería y la restauración entre otros) y, por otro lado, nos referimos a las campanas extractoras situadas en el ámbito doméstico, en el ámbito del hogar.

En el caso de las instalaciones de campanas extractoras de carácter comercial o industrial la necesidad de limpieza de filtros de la campana de una forma permanente y aún, sí cabe, más concienzuda resulta imperiosa. Y, resulta imperiosa esa necesidad de limpieza aún más a fondo y aún más constante dado que, en muchos ámbitos, la propia legislación vigente exige un estado de limpieza que obliga a realizarlo y que puede ser sancionado de no cumplirse. En este sentido las inspecciones para controlar su estado por parte de los organismos gubernamentales, o dirigidos por estos, competentes en la materia no resultan nada extraño.

Ese extra de control impuesto en el ámbito comercial e industrial tiene relación directa con el hecho de que deja de tratarse de algo que meramente se circunscribe a la escena de la vida privada de las personas, trasciende a todo ello y una mala higiene puede afectar tanto a los distintos empleados del local, así como a las propias personas usuarias del local y, en última instancia, a la sociedad en general.

En el ámbito de la vida privada no existe una regulación específica cómo es obvio pues se trata de eso, de la esfera privada de las personas y salvo en casos muy concretos ni se interviene, ni se puede intervenir. Pero que no se intervenga o no se pueda intervenir desde las administraciones públicas no significa que limpiar filtros campana no sea importante o que mantener una adecuada higiene general no sea necesario tal y como ya se ha venido mencionando.

Tal y como, ya se ha dicho antes la campana se debe de ir limpiando de una forma regular y la cadencia concreta dependerá muy mucho del uso concreto que se le dé, pero si nos referimos al caso concreto de los filtros de la campana debemos decir que los mismos nunca deberían limpiarse menos de una vez al año, el año es el tope máximo para limpiar cualquier tipo de filtros de cualquier cocina de uso doméstico y sin que ello signifique por supuesto que no se puedan limpiar en un espacio mucho menor de tiempo, en periodos más cortos, si la situación así lo requiere.

Para limpiar los lavavajillas la mejor opción siempre pasa por desmontar los mismos (la forma del desmontaje dependerá muy mucho de cada modelo en particular, pero todas las marcas y modelos tienen como característica general que resulta muy fácil de realizar) y limpiarlos tanto en el lavavajillas como manualmente.

La opción del lavavajillas para limpiar filtros campana resulta interesante pero no siempre será posible o no siempre será la única opción y luego deberá completarse la limpieza manualmente. El lavavajillas puede estar bien como una primera capa de limpieza para los filtros, pero si los mismos están muy sucios es improbable, por no decir imposible, que tan sólo con el lavavajillas se vaya toda la grasa y suciedad acumulada.

Una alternativa, o complemento, a la limpieza de los filtros de una campana con un lavavajillas es la que se realiza con un estropajo y cualquier producto detergente para lavar platos del cual se disponga. Con agua caliente, poniendo el filtro debajo del grifo y procediendo a su limpieza con dichos elementos se conseguirá eliminar gran parte de la suciedad, posteriormente para que el proceso sea completo simplemente se deberá poner dentro de un barreño cualquiera lleno de agua hirviendo al filtro en cuestión, dejarlo unos minutos dentro del barreño para que los restos de grasa se terminen de desprender y posteriormente retirarlo y dejarlo secar.

Otra opción para limpiar filtros campana pasa por desmontar los filtros y en la mima encimera rellenar ollas llenas de agua para poner los filtros cuando dicha agua empieza a hervir, el proceso será el mismo que el mencionado en el párrafo anterior. En este caso nos podemos encontrar con el hecho de que el filtro no quepa entero dentro de la olla en este caso deberemos realizar el proceso en dos partes: poner la parte que cabe dentro de la olla y dejar al agua hervir y realizar el proceso, luego sacar el filtro, vaciar la olla y volverla a rellenar y repetir el proceso con la otra parte del filtro que no cabía la primera vez.

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